En Solventa tu deuda estamos especializados en casos relacionados con la Ley de Segunda Oportunidad. En ellos, un concurso de acreedores culpable puede invalidar el proceso de cancelación de deudas, al considerar el juez que no se ha actuado de buena fe por parte del deudor.
Aunque podemos intentar ayudar a la empresa incluso tras la calificación de culpabilidad, lo ideal es no tener que llegar a esta situación. Por eso, te explicamos en qué consisten estos concursos y cómo evitarlos.
¿Qué es un Concurso de Acreedores Culpable?
Se consideran concursos de acreedores culpables aquellos en los que se identifica que el deudor (o sus administradores/representantes legales) han motivado o agravado la situación de insolvencia de la empresa mediante dolo o culpa grave.
Es importante destacar que existen grados de culpabilidad. Si el juez no aprecia dolo o culpa grave por parte del deudor autónomo, todavía es posible acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad.
Causas que Determinan la Culpabilidad del Concurso
La calificación del concurso de acreedores puede ser solicitada por la administración concursal o el Ministerio Fiscal. Las causas se dividen en dos grupos principales:
1. Causas de Culpabilidad Sin Posibilidad de Rebatir (Dolo/Fraude)
Son aquellas situaciones en las que los implicados no pueden hacer nada por modificar la calificación, pues evidencian mala fe:
- Cuando se cometen irregularidades o hay inexactitud/falsedad en los documentos del concurso.
- Cuando hay alzamiento de bienes o se sacan de forma fraudulenta bienes o derechos del patrimonio del concursado durante los dos años anteriores.
- Cuando se simulan situaciones patrimoniales antes de la declaración del concurso.
- Cuando se incumple la obligación de contabilidad o se procede a la liquidación por incumplimiento del convenio.
2. Presunciones de Culpabilidad Rebatibles (Culpa Leve o Negligencia)
Son aquellas situaciones en las que los implicados pueden intentar probar lo contrario, dado que se trata de presunciones de culpabilidad:
- Cuando se ha incumplido el deber de solicitar la declaración de concurso a tiempo.
- Cuando no se colabora con el juez o la administración concursal.
- Cuando hay incumplimientos relevantes en la contabilidad.
- Cuando se bloquean operaciones que frustran el acuerdo extrajudicial de pagos.
Cómo Evitar la Calificación de Concurso Culpable
La mejor forma de evitar un concurso de acreedores culpable es, obviamente, tomar decisiones empresariales que impidan que la deuda crezca hasta una situación insostenible.
Medidas recomendables para la prevención:
- No precipitarse en la toma de decisiones y reducir los costes todo lo posible.
- Negociar con acreedores tan pronto como aparezcan los primeros problemas.
- Mantener una contabilidad clara y auditada en todo momento.
La acción más recomendable es que, ante la posibilidad de un concurso de acreedores, cuentes con profesionales especializados. En Solventa tu deuda podemos ofrecerte asesoramiento personalizado y ayudarte en la gestión para, entre otras cosas, evitar esta calificación de culpable y asegurar la aplicación de la Ley de Segunda Oportunidad.
❓ Preguntas Frecuentes (FAQ) sobre Concursos Culpables
Sí, generalmente sí. La Ley de Segunda Oportunidad requiere que el deudor sea calificado como de buena fe. Un concurso de acreedores calificado como culpable (sobre todo por causas no rebatibles) implica automáticamente la falta de buena fe y, por lo tanto, la denegación de la cancelación de las deudas (Exoneración del Pasivo Insatisfecho o EPI).
Las consecuencias son graves. El deudor o administrador puede ser inhabilitado para administrar bienes ajenos o representar a cualquier persona durante un período de hasta 15 años. Además, debe responder con su patrimonio personal por las deudas concursales.
La calificación se realiza durante la fase de liquidación del concurso. El informe de la Administración Concursal o el informe del Ministerio Fiscal pueden solicitar formalmente que el juez declare el concurso como culpable, basándose en los motivos legales expuestos.




