La reunificación de deudas es una de las opciones disponibles para mejorar la economía familiar cuando los pagos mensuales se vuelven difíciles de asumir.
En Solventa tu deuda hemos ayudado a muchos clientes a reunificar sus préstamos, pero siempre recomendamos conocer bien todo lo que implica este proceso antes de tomar una decisión.
¿Cómo puedo reunificar mis préstamos?
La reunificación de préstamos consiste en unir la hipoteca y otros préstamos o créditos en una sola deuda, que pasa a gestionarse con una única entidad financiera.
El proceso no es complicado, pero requiere un estudio personalizado de la economía familiar y de los préstamos existentes, para evaluar la viabilidad económica del solicitante.
¿Es seguro reunificar préstamos?
La reunificación de préstamos se realiza a través de entidades financieras consolidadas y es recomendable contar con profesionales especializados para garantizar que todo el proceso se desarrolle correctamente.
No obstante, este tipo de operaciones conlleva ciertos riesgos y costes que conviene valorar:
- Costes de cancelación anticipada de los préstamos actuales.
- Gastos de formalización del nuevo préstamo unificado.
- Honorarios de intermediación si interviene una empresa externa.
Además, la reunificación puede suponer pagar más intereses si el nuevo préstamo se contrata a un plazo más largo, algo que puede encarecer notablemente el total adeudado.
¿Es la reunificación de préstamos la mejor opción?
Existen diferentes alternativas para hacer frente a las deudas. La Ley de Segunda Oportunidad, especialidad de Solventa tu deuda, es una de las opciones más eficaces para quienes desean empezar de nuevo sin cargas económicas.
La reunificación de deudas también puede ser útil si se dan las condiciones adecuadas. Permite reducir la cuota mensual y obtener un respiro financiero en el corto plazo, aunque a largo plazo puede implicar un mayor coste total.
Requisitos necesarios para reunificar préstamos
La reunificación de préstamos exige cumplir ciertos requisitos básicos que garantizan la viabilidad del proceso:
- Incluir todas las deudas: no se puede elegir qué préstamos unir. Es necesario incluir todas las obligaciones vigentes.
- Valor hipotecario: la nueva hipoteca no puede superar el 80% del valor del bien hipotecado.
- Historial financiero: suele requerirse no estar incluido en listas de morosos (como ASNEF o RAI) o contar con un avalista que respalde el préstamo.
Si estás valorando esta opción o no sabes cuál es la mejor manera de reorganizar tus deudas, contacta con nosotros. En Solventa tu deuda analizaremos tu caso y encontraremos la mejor solución para recuperar tu estabilidad económica y facilitar el crecimiento de tu hogar.
